El nuevo instrumento presupuestario financiará la reconversión industrial y energética para luchar contra el cambio climático. Los que se más beneficiarán son sobre todo Polonia y Alemania que más han tardado en la descolonización de la producción energética.
La Comisión ha repartido los 7.500 millones de euros según cuatro criterios que penalizan a los países más avanzados en la introducción de energías renovables incluyendo a España. Como la garantía que una parte del Fondo llega a todos los Estados se ha introducido un techo total (2.000 millones de euros) y un mínimo de 6 euros por persona. España se queda con una intensidad de 6,6 euros, mientras Polonia logró el máximo.
De esta manera el país centroeuropeo se quedaría con la cuarta parte del Fondo. La sigue Alemania que obtendrá un 11% del total y la tercera es Rumanía. Los tres países mencionados en total se quedarán con más de la mitad del Fondo. El objetivo de Bruselas es convencer a los países a reducir las emisiones de CO2 hasta un 45% en 10 años y hasta obtener la emisiones cero en 2050.
"Lo que estamos haciendo es enviar un mensaje a los mineros de carbón en Asturias, Macedonia Occidental o Silesia" reveló el encargado del Pacto Verde. El principal criterio de reparto es el nivel de emisiones de gases que tienen el efecto invernadero en las regiones con una gran intensidad de producción de carbón. Alemania y Polonia gana en este sentido sumando casi un 50% de CO2 emitido en Europa con una cifra de 900.000 toneladas. España produce 42.700 toneladas por la industria.
