Los mercados inmobiliarios de varias economías avanzadas empezaron a corregirse a mediados de 2022, en un contexto de mayores tipos de interés y erosión de la renta real disponible de los hogares.
Los mercados que registran los mayores descensos en el precio de la vivienda desde su máximo (con datos hasta diciembre de 2022 o febrero de 2023, según el país) son Australia (–9,7%), Suecia (–9,6%), Canadá (–10,4%), EE. UU. (–5,9%), Alemania (–5,7%), Nueva Zelanda (–5,0%) y Noruega (–2,8%). A pesar de estas caídas, el precio de la vivienda en todos estos países se encuentra todavía por encima del nivel prepandemia. Asimismo, las compraventas caen a tasas de dos dígitos en términos interanuales en varios de estos países: Australia (–47%), Noruega (–38%), Suecia (–35%), EE. UU. (–33%) y Nueva Zelanda (–31%).
Gráfico con los datos del precio nominal de la vivienda
Las señales de enfriamiento son algo más modestas en el Reino Unido y Países Bajos, con caídas de precios inferiores al 5%, pero el retroceso de la actividad empieza a ser evidente (caída interanual de compraventas del 18,2% en el Reino Unido y del 15,5% en Países Bajos en febrero de 2023).
???????? | El socialismo español lanza una peligrosa ley de alquileres que amenaza con destruir el mercado inmobiliario.https://t.co/gVSh3qKoK1
— La Derecha Diario (@laderechadiario) April 23, 2023
Perspectivas futuras
La tendencia descendente del precio de la vivienda debería continuar en los próximos trimestres, a medida que el endurecimiento de la política monetaria se traslada a la economía real. La velocidad e intensidad del ajuste en los distintos mercados inmobiliarios dependerán en gran medida de los desequilibrios que se hayan acumulado en la fase expansiva del ciclo inmobiliario.
En consecuencia, las correcciones deberían ser más abultadas en aquellos mercados en los que:
Los precios de la vivienda crecieron con más intensidad, por encima de la renta de las familias (mercados sobrevalorados), el endeudamiento de los hogares es elevado y ha mantenido una tendencia ascendente en los últimos años, y el coste de financiación para la compra de vivienda ha subido más con las actua