En términos anuales, las canastas de inflación básica (sin alimentos: bienes, servicios y regulados) mostraron mayores aceleraciones que la canasta de alimentos, lo que resulta relevante, pues muestra una aceleración importante de la inflación sin alimentos, cuya persistencia es mayor en el tiempo.
Esto se hace evidente también a través de la comparación del porcentaje de grupos dentro de cada canasta que se ubican por encima de la inflación anual total de octubre, en el que el porcentaje de la canasta de alimentos por encima de esta descendió en los últimos meses al 92%, mientras el de bienes se acelera hasta el 49%, sugiriendo que las presiones en inflación se estarían generalizando (Gráfico 3).
Hay mucha gente hablando de la inflación en EE. UU. y mezclando mensajes erróneos:
Hay mucha gente hablando de la inflación en EE. UU. y mezclando mensajes erróneos. La inflación no está bajando, sino que sube más despacio. Basta con ver el siguiente gráfico donde la línea negra muestra como sube la inflación y la línea azul muestra el incremento mensual. pic.twitter.com/kK9Ir2z9Vf
— Pablo Gil (@PabloGilTrader) November 13, 2022
Dentro de las canastas de inflación básica (Gráfico 4), la mayor aceleración se dio en la de bienes (143 pbs) que se ubicó en 13,0% en la variación anual
Esto podría estar asociado a incrementos en los precios de productos importados, en los que destacan las variaciones de vehículos (18,3%), productos de limpieza para el hogar (34,5%), artículos para higiene corporal (14,3%), productos farmacéuticos (10,2%) y bebidas alcohólicas.
Si bien los incrementos en estos productos se asocian en alguna medida a la alta tasa de cambio, el mayor efecto estaría relacionado a los altos precios que estos productos han alcanzado en el mercado externo y las restricciones de suministro de algunos.