Las proyecciones de la Fed (incluyendo para cuándo empezarán el taper) depende sobre si la tendencia que hemos visto en la inflación se modere para fin de año. Este es uno de los factores claves para determinar el momento para subir las tasas.
La idea general es si la inflación está bajo control en “el corto plazo”, entonces la Fed hará su taper antes de subir las tasas. Pero si la inflación sigue estando por encima de la tasa aceptable, entonces no sólo podrían adelantar el alza, sino que éste podría ocurrir antes del taper.
La semana pasada tuvimos un indicio de que la inflación podría persistir al alza. El índice de precios del productor estuvo por sobre las expectativas en 8,3% (se esperaba un 8,2%).
Fue el octavo mes consecutivo con un aumento, mostrando que la tendencia alcista no había terminado. Si bien no es necesariamente representativo de las tendencias inflacionarias, sí muestra que las empresas siguen estando presionadas por los precios de materia prima.
Hay otra explicación
Algunos analistas indican que el aumento en los precios del productor no es tan preocupante.
Apuntan a que es una comparación año-a-año, retornando a mediados de la pandemia. En ese entonces, vimos una baja (o por lo menos una desaceleración) en los precios. Entonces argumentan que el alza de precios no es tan dramático.
Pero si consideramos que la tendencia de largo plazo en los precios de los productores ha subido por lo menos 4 puntos porcentuales del promedio. Puede no ser tan dramático, pero eso no quiere decir que no haya un aumento sustancial.
También apuntan a los cambios mensuales, que han sido menores recientemente.
Los precios subieron rápidamente en el primer trimestre, pero desde entonces se han nivelado. Una comparación año-a-año no contempla que la mayoría del cambio esté concentrado en cuatro meses.
Entonces, la inflación sigue apareciendo alta, aún cuando tiende a la moderación.
Qué estamos buscando
Así aparenta ser la forma de pensar de los economistas al hacer sus proyecciones sobre las cifras inflacionarias que se publicarán luego. El mes pasado mostró una inflación plana, y ahora se pronostica una leve baja.
El IPC está pronosticado a mostrar una expansión mensual de 0,4% comparado con 0,5% en el mes anterior. Sigue siendo alta, pero se puede señalar que está bajando, y puede que se haya alcanzado un máximo.
Por otro lado, si subiera por encima del 0,5% mensual, provocaría una recalibración seria de los pronósticos, en particular sobre qué hará la Fed.
Para dónde podría ir el mercado
La cifra que la Fed sigue para determinar su política monetaria está previsto a tener el mismo panorama. El IPC subyacente está pronosticado a mostrar una expansión del 4,2% comparado con 4,3% anterior. Así la comparación anual bajaría a 5,3% desde 5,4%.
Así las autoridades podrían indicar que aparentemente la inflación está a la baja, y así se podría confirmar la agenda del taper de la Fed.
Si la inflación fuera aún más baja, probablemente no tendría tanto efecto sobre los mercados, pues estaría en el mismo sentido que los pronósticos. Pero una inflación más alta, especialmente considerando el PPI, podría preocupar a los traders.