El verano 2023 se anticipa atípico, marcado fuertemente por una inflación que obliga a buscar nuevas estrategias para disfrutar del descanso sin vaciar el bolsillo. Aunque se prevé una temporada récord en los principales destinos turísticos de nuestro país, sobre todo en la costa, los precios condicionan a los argentinos como pocas veces antes. Muchos de los que salían todos los años y ni siquiera evaluaban costos, ahora estudian modos de ahorro o de financiamiento de sus vacaciones. Otros, directamente deciden bajarse del plan por esta vez.
Todos despotrican contra la inflación:
Todos despotrican contra la inflación. No creo que haya más de 20% de argetninos que estén dispuestos a que se tomen las medidas necesarias para parar la inflación y a tener un sistema económico decente y serio.
— DardoG (@dardogasparre) November 25, 2022
En los casos más extremos, familias que nunca se lo habían planteado antes, resignan las vacaciones. Y aunque haya sido un año de enorme esfuerzo y trabajo intenso, la calculadora muestra que los números no cierran.
“Soy separada y siempre viajo con mi hija de 14 años. Para las vacaciones de invierno queríamos ir al sur, pero me fue imposible comprar los pasajes para dos personas, me salía muchísima plata”, cuenta Valeria Crowder, de 46 años, del barrio de Caballito, que trabaja en una empresa de ambulancias privadas. También tenía planes para salir de vacaciones en el verano, pero nuevamente desistió por los precios que se manejan para esta temporada en la costa. “El alojamiento es muy caro. Por más que quiera, no puedo. La plata ya no alcanza en el día a día…decidí quedarme”, relata.
Su idea es ir los fines de semana a la pileta del club y armar la propia, de lona, en su casa para hacer frente al calor
Algo similar le sucede a Martín, de 45 años, que trabaja en el rubro de eventos sociales, y optó por usar el presupuesto del veraneo para arreglar el fondo de su casa en CABA. En tiempos de crisis todo no se puede y hay que poner en la balanza cada proyecto. “Hicimos las cuentas y salir de vacaciones tanto a Brasil, como queríamos con mi mujer y mis hijos, o a la costa me representa mucho dinero. Entonces decidimos quedarnos y usar esa plata para poner lindo el jardín y disfrutar también acá sin tener que endeudarnos”, explica.
Sandra González, presidenta de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios de la Argentina (Adecua), logra tomar el pulso de los cambios de hábitos a través de las consultas y comentarios que recibe
“Hay mucha gente que nos dice que este año no se toma vacaciones, cuando generalmente se iba, porque no le alcanza. Estamos en un momento complicado, en líneas generales, la gente tiene que decidir entre pagar las expensas y los impuestos o irse de viaje”, asegura. Este panorama trazado por la especialista tiene su correlato en números: según un relevamiento del estudio Moiguer, la clase media dejó de abonar cuentas y servicios en un 20% durante el último mes.
Por otra parte, González considera que el movimiento turístico a nivel local se ve incrementado por la cantidad de argentinos que no aterrizarán en el exterior esta temporada:
“Obviamente, se trata de un sector que no pasa por la disyuntiva de vacacionar o no, pero son aquellos que quizás se iban habitualmente fuera del país y ahora vacacionan acá por los valores que se manejan”. Sin embargo, advierte que en la costa y en otros destinos locales también se dispusieron precios en dólares.