El presidente francés, Emmanuel Macron, está impulsando a la industria petrolera para vender combustibles a precio de coste para mitigar el impacto económico en los hogares franceses, mientras mantiene la posibilidad de permitir ventas con pérdida y exige más transparencia en los márgenes de refinación. Al mismo tiempo, SEFE, la empresa de gas alemana, planea utilizar de nuevo gas natural licuado ruso, contradiciendo la meta del gobierno federal alemán de reducir la dependencia de los suministros rusos. Este resurgimiento en el uso de GNL ruso y la intervención francesa en los precios de los combustibles son vistos por expertos como posibles indicativos de una "Crisis Energética 2.0".
Macron impulsa venta de combustibles a precio de coste para aliviar presión económica en hogares franceses
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha expresado su intención de impulsar al sector petrolero del país para vender gasolina y diésel a precio de coste, buscando aliviar el impacto de los crecientes precios en los hogares sin incurrir en grandes gastos públicos. Macron afirmó que mantendrá la posibilidad de permitir a las gasolineras vender con pérdida como una medida potencial y exigirá mayor transparencia sobre los márgenes al sector durante una reunión con todos los actores involucrados esta semana. Aseveró que se podría actuar sobre los márgenes abusivos en la refinación, durante una entrevista el domingo en la noche. Los precios de los combustibles son un tema políticamente sensible en Francia; un incremento en 2018 desencadenó el movimiento de los Chalecos Amarillos, que se transformó en meses de protestas por el costo de vida.
El año pasado, el gobierno otorgó subsidios generales - un gran coste para las finanzas públicas. Macron descartó la reintroducción de estos descuentos y afirmó que el gobierno no puede permitirse reducir impuestos sobre los combustibles y, al mismo tiempo, financiar la transición ecológica y el estado de bienestar. Se prevé un incremento en el gasto anual para la transición verde a €40 mil millones, parte del cual se destinará a la conversión de las dos centrales eléctricas de carbón restantes de Francia a biomasa para 2027.
SEFE retoma el uso de GNL ruso, desafiando la postura del gobierno alemán: ¿Enfrentamos una Crisis Energética 2.0?
La semana pasada, la empresa de gas SEFE (anteriormente Gazprom Germania), anunció que planea comenzar a utilizar una vez más gas natural licuado (GNL) ruso, lo que marca la primera vez desde el inicio de la crisis energética del año pasado. Según informes de Bloomberg, este movimiento contradice el objetivo del gobierno federal de reducir la dependencia de los suministros rusos. SEFE planea recibir un envío de GNL de la planta de licuefacción de Yamal en Siberia el 1 de octubre. La posición de Berlín ha sido oponerse fuertemente a la importación de GNL ruso, haciendo hincapié en que no apoya la compra de gas licuado ruso, como se afirmó en un documento de enero del Ministerio de Economía, que supervisa a SEFE.
Experta en mercados y estratega geopolítica Velina Tchakarova opina que las recientes acciones de Francia y Alemania en el sector energético podrían ser indicativos de una inminente crisis energética.
French President Macron said that France will ask the #Oil industry to sell fuels at cost. German state-owned trader SEFE is about to start purchasing Russian LNG cargos again this winter. Do you see the pattern here? We are likely facing #Energy Crisis 2.0#oilandgas #Velsig
— Velina Tchakarova (@vtchakarova) September 24, 2023
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