Prácticamente todos los inversores empiezan su aventura en el trading a partir de una cuenta de demostración. Sin embargo, demasiados la tratan como un juego. Muchos de ellos, una vez que aprenden el funcionamiento básico del mercado Forex, pasan a invertir de forma real. Parece una buena estrategia, al fin y al cabo cada profesional empieza gateando.
¿Qué es una cuenta demo?
Una cuenta de demostración es lo más parecido a una cuenta real, con la única diferencia de que el capital con el que se opera es totalmente virtual. Todo el conjunto, la oferta del corredor, las herramientas, la normativa de trading, las cotizaciones y los movimientos de los precios deberían ser de lo más reales, exceptuando el capital. Una cuenta demo se puede emplear de diversas maneras en el trading, siempre y cuando recordemos lo que viene a continuación.
Cuenta demo versus oferta del corredor de Forex
No todos los corredores mantienen las mismas condiciones de trading en las cuentas de demostración que en las reales. Muchos corredores consideran que una cuenta demo tiene la única utilidad de familiarizarse con el mercado. De hecho, si se diera el caso de que el representante del corredor de Forex te intentase convencer de abandonar la cuenta demo y empezar a invertir en una real, empleando los argumentos que acabas de leer, querrá decir que es hora de cambiar de corredor de Forex. Pero, volviendo a lo que estábamos tratando, en varios corredores puede ocurrir que las condiciones de una cuenta real en comparación con una de demostración sean totalmente diferentes; los spreads, las comisiones o su falta. También puede ocurrir que nos engañen las apariencias; las ofertas pueden ser iguales, pero lo que marque la diferencia será el tiempo de ejecución de las órdenes. En las cuentas demo podemos llegar a tener la sensación de que nuestras órdenes se ejecutan incluso antes de darle al botón.
Sin embargo, en una cuenta real es algo que puede llevar medio segundo, un segundo e incluso tres. Otro factor pueden ser los deslizamientos de los precios, es decir; la ejecución del pedido a un precio que no era el que nos interesaba. Los deslizamientos, de hecho, son algo de lo más normal, pero también algo que no presenciaremos en el trading de una cuenta demo. La ejecución de nuestras órdenes a un precio menos atractivo del que nos interesaba, o la ejecución del stop loss en un valor diferente al solicitado son hechos que nos pueden generar más pérdidas y hundir nuestra cuenta. Es por ello que las estrategias automatiadas funcionan muy bien en las cuentas demo, pero ya no tanto en las reales. Es una cuestión a tener en cuenta a la hora de medir nuestros movimientos en el trading.
¿Merece la pena usar una cuenta demo?
Definitivamente sí. Además de mostrarnos el mercado y su funcionamiento junto a las bases de trading, la cuenta demo será nuestra amiga durante todo el tiempo que queramos ir probando estrategias nuevas antes de aplicarlas en el mercado real. Merece la pena emplear la cuenta demo para conocer el mercado, la variación de los precios, ir elaborando estrategias nuevas, realizar estudios del mercado, crear sistemas, aprender a manteres nuestras posiciones... Será el lugar perfecto para probarnos sin correr el riesgo de grandes pérdidas ni problemas piscológicos incluso antes de conocer el funcionamiento del mercado. Si no tuviéramos la oportunidad de usar una cuenta demo, lo más probable es que nos dejaríamos cegar por nuestras emociones.
Las cuntas demo también son usadas por profesionales al mismo tiempo que llevan sus cuentas reales; las demo las usan con el fin de probar nuevas estrategias. Es por ello que no podemos decir que las cuentas demo sean únicamente para los ‘novatos’. Obviamente, nadie quiere ser un principiante, pero es una etapa por la que todo profesional ha pasado, y lo esencial tratar de no estropear dicha etapa; es ahí donde la cuenta demo será imprescindible.