¡Vigilamos el índice SP500 y EuroStoxx-50! Los beneficios empresariales mejorarán, la inflación confirmará su moderación y los tipos directores habrán alcanzado sus máximos. Aprovechar retrocesos para posicionarse es la clave

Tras los retrocesos del año pasado, 2023 arrancó al alza. En enero los índices subieron con fuerza (+6,2% S&P 500 y EuroStoxx-50 +9,8%) y en febrero se impuso la racionalidad. Las bolsas se tomaron una pausa (-2,6% S&P 500 y EuroStoxx-50 +1,8%). El mercado empezó a poner en valor la intención de los bancos centrales de subir tipos con determinación y mantenerlos elevados durante un largo periodo.
A principios de marzo el contexto cambió a raíz de las dudas generadas primero por SVB y, posteriormente, por Credit Suisse. Finalmente, se confirmó nuestra tesis. Se trata de casos aislados y no de un problema sistémico. Tras este impasse, el mercado se centra de nuevo en los fundamentales y lo cierto es que el segundo semestre presenta mejores perspectivas por varias razones. En primer lugar, los beneficios empresariales ganarán inercia tanto en EE.UU. como en Europa y darán paso a avances de +12% en el S&P 500 y +6% en el EuroStoxx-50 en 20249 .
Cierre de Wall Street "El SP500 intenta buscar los 4150 puntos importantísimos para el mes de abril"https://t.co/tp1nCAX68i pic.twitter.com/ksZbtLlrRS
— negocios tv (@negocios_tv) April 10, 2023
La probabilidad de que éste sea inferior al descontado hace tan solo un par de semanas es muy alta. En términos generales se situará unos -25 p.b. por debajo. En tercer lugar, la inflación comenzará un proceso de mejora entre marzo/junio. No será una evolución lineal. Habrá vaivenes. Entre otros motivos por la reversión de las distintas medidas de ayuda implementadas por los gobiernos, pero el efecto base será potente y positivo. En este escenario, mantenemos nuestros niveles de exposición a renta variable inalterados. En concreto, entre el 15% del perfil Defensivo y el 70% del Agresivo.