No es fácil, eso es lo primero que hay que comunicar, nada fácil.
¿Qué necesitas?
Madurez emocional. Si no controlas al 100% tus emociones sobre el mercado, no puedes dar el paso.
Una vez te dediques profesionalmente a esto, no puedes cometer un solo error por motivos emocionales.
El mercado es el mercado, entras en tu zona zen y trabajas, atrás quedan tus discusiones con tu pareja y la enfermedad de tu madre.
¿Cómo se consigue llegar aquí?
Primero de todo, tienes que valer. Yo no valgo para ser médico, no soy capaz de ver a alguien desangrándose. ¿Tú eres capaz de ver tu cartera desangrarse y no romper las reglas de sistema de inversion y actuar por emociones?
No todos valemos, es así.
Horas, horas, horas y horas de estar ligado al dinero. Llevo desde antes de los 18 años recibiendo mis ingresos en base a mis estrategias. Comencé con las apuestas siendo menor de edad, pasando por el póker profesional y hasta ahora llegar aquí.
Eso me hizo fuerte psicológicamente para conservar la serenidad ante los drawdowns. Si no tienes esta habilidad cultivada, no puedes dedicarte a esto profesionalmente.
Que te apasione, como todo en la vida. Si tu trabajo te gusta, te apasiona, serás mejor. Si estás aquí te tiene que gustar la economía o si operas técnico el técnico, si solo estás para ganar dinero y no te gusta, perderás tu dinero.
Por último, dedicarle tiempo. Por mucho que te guste, si no le dedicas horas, no podrás llegar a sacarle verdadera rentabilidad. Yo estudio todos los días varias horas, incluso leo los análisis o artículos de otros inversores. Aprovecha todos los recursos disponibles a tu alcance e incorporarlos como parte de tu aprendizaje.
El camino no es sencillo, tendrás que sacrificar muchas cosas, pero llegará un momento en el que todo ese fuerzo habrá merecido la pena.
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