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Se nos viene una inflación con múltiples consecuencias para las economías mundiales. ¿La oportunidad que esperan las criptomonedas?

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Los inversores se preparan para varios meses de angustia por la inflación que desafían la estructura del posicionamiento de los mercados mundiales mucho más que el frenesí bursátil de los aficionados en el mes de enero.

En medio de la esperanza de que lo peor de esta última oleada pandémica haya pasado con el despliegue de las vacunas, la radical bajada de casos del virus en Estados unidos, parte de Europa y la pequeña caída del desempleo tienen esta semana a los índices bursátiles en tendencias de compra a diferencia de lo que se esperaba para comienzos del mes de febrero.

Sabemos desde el año pasado que una de las preocupaciones de la economía mundial era la posible inflación generada por consecuencias del covid-19. Las expectativas de inflación basadas en el mercado están subiendo. Algunos indicadores del mercado de swaps y bonos indexados alcanzaron esta semana su nivel más alto en más de dos años en Estados Unidos y en más de 12 meses en la zona euro.

A pesar de las promesas de dinero fácil de los bancos centrales, las tasas de interés aproximada al 0% y el coste de los préstamos a largo plazo está siguiendo el mismo camino. Los rendimientos de la deuda pública estadounidense y alemana a treinta años alcanzaron su nivel más alto desde que se desató la pandemia, y este último se volvió positivo el jueves por primera vez desde marzo y las curvas de rendimiento se empinaron hasta alcanzar su nivel más alto en casi cuatro años, sin mencionar que muchos países de Latam ya están con problemas inflacionarios desde el año 2020.

Los datos de las Naciones Unidas muestran que la inflación anual de los precios de los alimentos superó el 10% el mes pasado, gracias sobre todo al aumento de los precios de los cereales, y el índice que elabora se situó en su nivel más alto desde 2016.

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A poco menos de 60 dólares por barril, los precios mundiales del crudo volvieron a ser positivos en términos interanuales en febrero. Si se mantienen así durante los próximos tres meses, el desplome del crudo Brent hasta los 15 dólares durante marzo y abril del año pasado empezará a alimentar un pulso anual de precios energéticos en las cifras de inflación.

La cuestión central es si esto es solo transitorio en torno a un reinicio de la economía mundial o si se afianza en las hipótesis de inflación a largo plazo, como ocurre con todos los picos de inflación.

La revolución de cripto divisas 2021

Los inversionistas tienen bastantes opciones para protegerse contra este suceso, mediante acciones, metales preciosos u otras inversiones que desde siempre hemos tenido. En términos generales, éstos tienden a conservar su valor incluso cuando el valor de la moneda fiduciaria cae. Así los inversores solo deben esperar a que el valor de dicha moneda se estabilice o probablemente empecemos a transferir la riqueza a otra moneda si fuera necesario, como una criptodivisa deflacionaria.

Sabiendo en el contexto que nos encontramos desde fines del año 2020 y el crecimiento exponencial de las criptomonedas es donde me quiero dirigir. Mientras que los criptoactivos son todos parecidos, cualquier criptomoneda que tenga un número fijo de unidades, solo puede ser deflacionaria. Tomando en consideración bitcoin esto sucede porque solo hay 21 millones de BTC a ser minados y dado que algunos se pierden casi a diario, resulta ser un suministro diseñado para aumentar su valor con el tiempo, ya que cada vez es más escaso. Es lo que está pasando ahora mismo al momento en que escribo este artículo, la especulación no ha parado de crecer y las criptomonedas no dejan de subir de precio.

Hay ciertas cosas para tener en cuenta sobre las criptomonedas antes de invertir ciegamente en activos criptográficos. Una de ellas es que la filosofía deflacionaria solo se puede aplicar a proyectos con un límite en su suministro y deben tener una demanda real, es por eso que en años anteriores las criptomonedas no tuvieron ese interés tan real y potencial como ahora mismo. Lo vivido desde noviembre del año 2020 es una verdadera revolución, con compras masivas y crecimientos de algunas criptomonedas por más del 600%. Podemos creer sin lugar a dudas que si la economía mundial cae en una inflación mundial en estos próximos meses los potenciales valores refugio serán las criptomonedas, haciendo crecer aún más sus ganancias.

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Otro punto a tener en cuenta es que, mientras que las criptomonedas ofrecen tentadores beneficios sobre el sistema monetario tradicional, siguen siendo una tecnología nueva y aún en evolución. Ningún cripto activo ha probado aún que pueda reemplazar exitosamente al sistema monetario tradicional y actuar como un medio de transferencia de valor de uso diario, aunque este año en los meses que estamos llevando la idea de pensar en eso se vuelve menos lejana. Algunos ya apuestan en que estamos a puertas de un nuevo y descentralizado sistema monetario.

El Índice global de cripto usuarios 2021, elaborado por la empresa Binance, sostuvo que el 97% de los usuarios tiene una real confianza en las criptomonedas y que más de la mitad (52%) considera a la cripto inversión no como un pasatiempo, sino como un medio de ingresos. La compañía recalco así mismo el impresionante aumento de compra de criptodivisas por parte de nuevos clientes.

Las criptomonedas nacieron con la intención de ver surgir un nuevo sistema financiero y puede que esto sea solo el comienzo. Mientras tanto, no hay escasez de activos que actúen como protección frente a la inflación fiduciaria. Dicho esto, cada inversor deberá analizar si comprar criptomonedas, analizar su situación y tomar sus propias decisiones.


Francisco Javier Conejeros Monsalve

Francisco Javier Conejeros Monsalve

Economista y gestor bursátil parte del equipo de Idemercados. Para mentoría y formación encuéntrame en  https://www.idemercados.com/ 


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