En diciembre, la inflación mensual ascendió hasta el 1,26% y la anual alcanzó el 13,12%, acelerándose en 59 pbs frente al dato del mes anterior y superando nuevamente las expectativas de los analistas del mercado, que esperaban que el dato se ubicara en 12,64% (según la encuesta de expectativas de analistas del BanRep). La mayor aceleración la tuvo la inflación de alimentos, que alcanzó una variación anual de 27,8%, 72 pbs por encima del dato de noviembre; en tanto que la inflación básica se aceleró en 51 pbs llegando al 9,99% en términos anuales (Gráfica 1). Así, la inflación anual cerró el 2022 en un pico histórico de los últimos 23 años, llevando a que el costo de vida para los colombianos incrementara en promedio un 10,15% respecto a 2021.
Reducir malversación, eliminar sedición, indultar corruptos, ley que reduce penas a violadores, disfrazar paro e inflación. Un orgullo de transformación:
Reducir malversación, eliminar sedición, indultar corruptos, ley que reduce penas a violadores, disfrazar paro e inflación. Un orgullo de transformación.
— Daniel Lacalle (@dlacalle) January 8, 2023
Los alimentos registraron las mayores presiones durante 2022
La inflación de alimentos alcanzó el 27,8% al cierre de este año, también rompiendo los máximos de este siglo, con niveles que no se veían desde 1988 en esta división. De esta manera, el promedio de inflación de alimentos en 2021 fue de 24,89%(Gráfica 2), cerca del doble del más alto en lo corrido del siglo (13,2% para julio de 2016) .
Si bien la canasta no registró aceleraciones destacadas durante el año, se mantuvo en altos niveles a lo largo de este, contrario a las expectativas iniciales de los analistas
Las principales causas para la dinámica de esta división estuvieron asociadas a los altos precios que enfrentaron los agricultores en materia de insumos importados, no solo por los cuellos de botella causados tras la pandemia, sino también a razón de la guerra en Ucrania, que impactó el abastecimiento de materias primas producidas por los principales involucrados. A lo anterior se adicionó el fenómeno de la niña que se extendió más de lo esperado, al menos hasta el último mes del año, impactando la oferta de los productos agropecuarios.
Lo anterior se ve reflejado más directamente sobre la subcanasta de alimentos perecederos, que en diciembre alcanzó el 37,6%, al acelerarse en 213 pbs frente al mes anterior, jalonada por productos como huevos (33,68% anual), plátanos (64,12% anual), cebolla (106,8% anual), papas (33,77% anual) y frutas frescas (22,8% anual). Esta subcanasta mantuvo el mayor nivel de inflación a lo largo del año, la cual alcanzó a tener un promedio de 35,5% a pesar de terminar el 2022 con descensos. El efecto de los altos costos que se transmitieron al consumidor final también se perciben a través del índice de precios del productor (IPP) para el sector agropecuario y silvicultor, cuya variación anual promedio fue 21,9%.
La subcanasta de procesados parece continuar en ascenso:
Cerró 2022 en 28,4%, acelerándose con menor fuerza que en meses anteriores, en apenas 50 pbs frente a noviembre, e impulsada por productos como arroz (54,05% anual), leche (36,65% anual), pan (30,36% anual) y quesos (27,45% anual). Algunos de estos incrementos están asociados a mayores costos de insumos. Así, esta subcanasta muestra una continuidad en las presiones que también están influenciadas por los precios externos de cereales, que se importan como materia prima para varios de los productos que la componen. No obstante, su promedio del año fue de 20,69%, por debajo del de perecederos.