Evolución de la cartera en 2022, ¿cuáles son los cambios que se han dado en la cartera? Estilo de gestión y objetivo de rentabilidad... Entra Inditex en lugar de Sanofi

La Cartera de Acciones Dividendo cerró el año con una rentabilidad acumulada de -1,1 %, compuesta por un -6,1% proveniente de la inversión (principal) y un +5,0% de los dividendos percibidos. Compara favorablemente con los dos principales índices de referencia: EuroStoxx-50 (-11,7%) e Ibex 35 (-5,6%). En diciembre sólo terminaron el mes en positivo Sanofi (+3,9%) e Iberdrola (+1,4%). En el lado opuesto, los principales valores que penalizaron la cartera fueron Telefónica (-5,6%), Mercedes (-4,7%) y AXA (- 3,6%). Sólo pagó dividendos Telefónica, con una rentabilidad de +4,2%.
De cara a 2023 elevamos hasta el rango + 2,9%/+ 3,4 % (vs +2,4%/+2,9% hasta ahora) nuestro objetivo actual de entregar una rentabilidad anual mínima vía dividendos, para ajustarnos a las actuales expectativas de inflación (inflation swap) a 5 años en la Eurozona: +2,4% (vs +1,9% hasta ahora) más un diferencial real de entre +50p.b. y +100p.b. anuales. En segundo lugar, realizamos un único cambio en la composición de la cartera con el fin de reducir exposición a sectores defensivos. Entra Inditex en lugar de Sanofi. La rentabilidad por dividendo media se reduce ligeramente hasta 6,4% (vs 6,5% anterior).
“Bitcoin llegará a máximos notables”, dicen Analistas de Bloomberg #Bitcoin #Bloomberg #EstadosUnidos #Fed #recesion via @bitfinanzas https://t.co/rlTogDC5f1
— BitFinanzas (@BitFinanzas) January 11, 2023
El objetivo es entregar una rentabilidad anual mínima entre + 2,9% y + 3,4% procedente directamente de los dividendos abonados por las compañías en cartera, pero conservando al menos intacto el patrimonio (i.e., manteniendo intacta la inversión inicial) en mediciones de 3 años móviles. Es decir, entregar una rentabilidad anual de +2,9%/+3,4% sin que la inversión pierda valor en un periodo móvil de 3 años.
La rentabilidad anual mínima objetivo de +2,9%/+3,4% se justifica partiendo de la inflación esperada a 5 años para la Eurozona (+2,4%), que sería la pérdida de valor nominal anual de la inversión por la erosión de precios, más un diferencial real de entre 50 y 100 p b anuales como objetivo autoimpuesto. En definitiva, el objetivo es obtener una rentabilidad nominal anual equivalente a la inflación esperada a inicio de cada año, más 5 0/100 pb.