La crisis del coronavirus originada a principios de 2020 ha deteriorado la actividad económica, suscitando ciertas dudas en torno a la evolución de la solvencia de las compañías más afectadas y, por tanto, de su riesgo de crédito. La CNMV elabora informes trimestrales con el objetivo de analizar las calificaciones crediticias de los activos de deuda españoles desde el principio de la crisis. El primero de estos informes, además, comparaba estas con las calificaciones de una muestra de emisores privados de otros países europeos.
Un aumento del riesgo de crédito, de observarse y persistir, podría reflejarse en rebajas en los ratings de las diferentes compañías, que, de ser significativas, podrían producir efectos perjudiciales en muchos de los agentes que participan en los mercados y, en última instancia, podrían tener implicaciones negativas para la estabilidad financiera.
???? Soft landing... ¿Es posible?
— Diego Puertas (@misterpuertas) May 28, 2023
En el artículo de hoy reflexiono sobre ello, además...
- Comento la situación de la crisis bancaria (segunda fase para mi prácticamente cerrada)
- Expongo el mayor ritmo de quiebras desde 2010
- Reflexiono sobre la evolución de mercado y el… pic.twitter.com/UZ0xFkf5H3
Entre otras, podrían producirse ventas significativas de activos, espirales bajistas de precios, diferentes fenómenos de contagio entre entidades, encarecimiento de la financiación, etc
El análisis efectuado sobre la deuda española2 se lleva a cabo con las emisiones vivas de renta fija al cierre de cada trimestre. El número de emisiones de las que se disponía de información con ISIN se ha situado en torno a 3.350 cada trimestre y de ellas se analizan regularmente las emisiones de las que se dispone de calificación crediticia (aproximadamente un 95 % del total de deuda con ISIN). Tal y como se observa en el cuadro R5.1, se produjo un aumento considerable del saldo vivo de deuda con calificación entre marzo y junio, de 1.685.262 millones de euros a 1.777.151 millones de euros, como respuesta a las necesidades de liquidez en el contexto de la crisis y aprovechando los bajos tipos de interés.
También se registró un aumento en septiembre, hasta 1.795.355 millones de euros, seguido de una ligera disminución hasta 1.769.732 millones de euros en diciembre, sobre todo debido a la amortización de algunos activos de deuda de alta calidad crediticia
Este análisis pone de manifiesto que las emisiones de renta fija española analizadas tienen en su mayoría la consideración de grado de inversión —investment grade— (con calificación BBB o superior), pues las que gozan de esta calificación suponen como promedio para el periodo de análisis un 96,5 % del total de las emisiones para las que se ha obtenido rating. Este porcentaje se ha mantenido bastante estable durante el año, aunque en el último trimestre disminuyó ligeramente y se situó en el 96,3 %. Este retroceso se explica casi en su totalidad por la reducción de los valores con calificación A y AA (debido a la amortización de deuda de la Administración central en el primer caso y a la de instituciones financieras monetarias y no monetarias en el segundo).