Después de declarar públicamente la censura y falta de libertad de expresión que hoy en día sucede en Twitter, Elon Musk decidió tomar cartas en el asunto y convertirse en máxima accionista de la empresa adquiriendo el 9.2% de las acciones, quedando por delante de Vanguard 8,8% con el, [gamma] Morgan Stanley con el 8,4%.
En la respuesta se afirmó que un 70% de los usuarios piensan que no tienen suficiente libertad de expresión a la hora de escribir sus publicaciones. Algunas de las soluciones sugidas por Musk fueron la creación de una nueva y más libre plataforma, donde los usuarios tendrían más libertad a la hora de expresar sus ideas. Otra sugerencia fue comprar Twitter. La idea de que el creador de Tesla se convirtió en “dueño” de Twitter fue muy aclamada por los usuarios, dando pie a que Elon Musk decidió entrar en acción y se hizo con más de 73 millones de acciones.
Al parecer, el fundador de Tesla había aceptado un puesto en la junta directiva la semana anterior. Este gesto contradecía un documento regulatorio en el que afirmaba entrar en la empresa solamente como un accionista pasivo.
Por otro lado, el consejero delegado de Twitter puso en alerta a los empleados por posibles distracciones. Esto se debe a las críticas publicadas por Musk en la red social Si el fundador de tesla entrase en el equipo directivo, el presidente temía que quisiera hacer ajustes en las políticas de la empresa que complicarían o modificaría el trabajo que realizan los empleados actualmente.
El delegado de Twitter también agregó en su comunicado que la exposición de Elon Musk y la decisión de no tomar parte en la dirección de Twitter era una excelente idea. A los demás dijo que, por ser el accionista más importante que la compañía posee, siempre tendrán en cuenta cualquier aporte que Elon quiera tener.
Las decisiones que toman y como se ejecutan siguen en sus manos y quieren fortalecer en su trabajo y lo que están construyendo.
