Las carteras obtienen rentabilidad positiva en octubre, apoyadas en el rebote de bolsas. Si bien, consiguen capturar tan sólo parte de las subidas, al estar posicionadas de forma defensiva. Los niveles de exposición a renta variable son bajos (entre 5% y 45% dependiendo de los perfiles), con intención de proteger el patrimonio.
Las carteras globales se ven penalizadas además por la depreciación del dólar (-0,8% en el mes), con exposición de entre el 55% y el 65%, por lo que presentan rentabilidades más moderadas, de +0,1% (Conservadora), +0,5% (Moderada) y +1,1% (Agresiva).
1/3 Hubo un tiempo, el lustro 2003-2007, en el cual el #Ibex35 dejó en ridículo al #SP500.
— David Núñez Longueira (@mellizonomics) November 5, 2022
* Datos de rentabilidad real extraídos del Vanguard 500 en € (2003-2005) y del FN ING Direct SP500 (2006-2007), así como del FN ING Direct IBEX35 (2003-2007). pic.twitter.com/9V2toBZEpQ
En el acumulado del año, la rentabilidad de nuestras carteras modelo domésticas se encuentra entre -11,9% (Conservadora), -14,8% (Moderada) y -21,7% (Agresiva). La rentabilidad de las carteras globales varía entre en -6,4% (Conservadora), -8,1% (Moderada) y -12,3% (Agresiva). En el mismo período la rentabilidad de los principales índices de referencia oscila entre -18,8% el S&P 500, -21,2% del MSCI World y -8,7% del IBEX-35.
