A diferencia de las lentas reacciones de la FED, el BCE y el BOE para atajar las presiones inflaciónistas, en los países latinoamericanos los bancos centrales fueron mucho más drásticos

A diferencia de otras geografías, la política monetaria nipona venía siendo estructuralmente laxa desde hacía décadas. Las tasas de interés ya se habían situado al cero por ciento en 2011 y a partir de 2016 se habían bajado hasta el -0,10% a la vez que se implementaba un control sobre la curva de tipos limitando la rentabilidad de los bonos hasta un plazo de diez años.
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— negocios tv (@negocios_tv) May 17, 2023
Pese a la diversidad de países y condiciones particulares presentes en la región, podemos decir que en términos económicos el bloque central de economías de centro y sur de América experimentó fuertes subidas de inflación durante 2021 y 2022: Chile (14%), México (8,7%), Brasil (12,1%), Colombia (12,2%), Perú (8,8%), y que la respuesta por parte de los bancos centrales de cada país fue una subida rápida de tasas de interés en todos y cada uno de los casos.
A diferencia de las lentas reacciones de la FED, el BCE y el BOE para atajar las presiones inflaciónistas, en estos países los bancos centrales fueron mucho más drásticos y, en la mayoría de los casos, para finales de 2022, ya habían situado las tasas de interés reales en terreno positivo. Pero no debemos infravalorar el hecho de que a una situación económica complicada hay que añadir la inestabilidad política en la región que está exacerbando el tensionamiento social en la mayoría de los países de la zona.