Un presupuesto personal es algo que todo deberíamos hacer, preferiblemente, con carácter mensual. También es posible hacer un presupuesto anual más genérico, que puede permitirnos hacernos una idea global de nuestros gastos e ingresos y de la cantidad que podemos destinar a invertir cada año, si bien el presupuesto mensual siempre va a ser mucho más preciso.
Os animo a tod@s a realizar vuestro propio presupuesto personal, es la planificación de forma visual de vuestros gastos e ingresos, presentes y futuros. La forma de hacerlo es totalmente libre. Hay quién pueda preferir utilizar un cuaderno y un boli, una tabla Excel, etc. Incluso hay personas que van más allá y agrupan los gastos por sectores (salud, alimentos, ocio, etc.) e, incluso, colores. Cada uno debe escoger la forma con la que se sienta más cómod@.
Todos saben cuánto ganan, pero casi nadie sabe cuánto gasta o, incluso, en qué ha gastado el dinero. De ahí, entre otros, la importancia de realizar un presupuesto.
Si queremos ahorrar, debemos hacerlo nada más recibir nuestros ingresos, a primeros o finales de mes (según cada persona), separando desde el inicio una parte para invertir, en lugar de gastar y después ahorrar lo que sobre. Es decir, la inversión debe ser una prioridad en nuestras finanzas mensuales, destinando a ella una parte de nuestros ingresos -una vez deducidos nuestros gastos fijos obligatorios y variables necesarios, a los que haré referencia más adelante- y lo que sobre después de esa operación es lo que podremos dedicar a gastar de forma libre (gastos discrecionales, a los que también haré referencia más adelante).
Tenemos que tener prioridades, si queremos gastar en algo, pero no tenemos suficiente dinero, podemos ver si hay algo no necesario que podamos retirar ese mes para introducir nuestro nuevo gasto.
Debemos vivir dentro de nuestras posibilidades y, con este plan estructurado, podréis ver lo que sucedería si, por desgracia, os quedarais sin fuentes de ingreso u, os surgiera algún imprevisto y con unos gastos grandes. Es aquí donde cobra la importancia tener el dinero invertido en una copia como eToro que te da liquidez cuando lo necesites.
Podemos separar los gastos en 3 categorías:
1.Fijos y obligatorios: Hipoteca, alquiler de casa, seguros, préstamos... Estos gastos son fijos y prioritarios, no podemos prescindir de ellos.
2. Gastos variables necesarios: Cesta de la compra, internet, telefonía, ropa, etc. Son necesarios, pero siempre se puede ahorrar dependiendo de la marca, recurriendo a ofertas, etc.
3. Gastos discrecionales: Estos son los primeros que debemos quitar si queremos ahorrar o nos viene un gasto de tipo 1 o 2. Como ejemplos podemos mencionar Netflix (o cualquier otra plataforma similar), gimnasio, salir de cena, copas, etc.
Espero que este post os haya parecido interesante y, si aún no hacéis presupuestos personales, os animéis a hacerlo. ¡Veréis cómo empezáis a ahorrar más y mejor!
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