Las velas japonesas; conceptos básicos

Hace más de 400 años habíase un empresario japonés llamado Munehisa Homma dedicado a la venta del arroz. Dicho hombre estaba pasando una noche solo, sentado a la mesa, con la única compañía de una vela y sake. Fue tras algunos vasos de esa bebida conocida por despertar la creatividad y la claridad de mente, cuando se lo ocurrió la genial idea de representar las variaciones de los precios del arroz mediante estructuras parecidas a las velas.
Las primeras pruebas de memorizar y clasificar los movimientos de los precios no dieron resultados satisfactorios, por lo cual decidió desarrollar su idea, dedicándole más tiempo. No obstante, Munehisa Homma muere y su idea no vuelve a encontrar a un sucesor durante cientos de años, sobre todo en el Oeste, donde todos estaban acostumbrados a los gráficos de barras o líneas. Todo cambió en los años 90 del siglo pasado, cuando Steve Nison popularizó las velas japonesas en los tiempo actuales.
Estos contenidos tienen como fin el acercar al lector e inversor a las formas más populares de velas, tratando sus bases de construcción y análisis.
Para construir una vela japonesa necesitaremos de cuatro elementos básicos:
Los precios de apertura y cierre determinarán los límites del cuerpo de la vela y su color. Si el precio ha subido desde el inicio del espacio de tiempo estudiado, el cuerpo de la vela será de color blanco con el precio de apertura localizado abajo, y con el precio de cierre localizado arriba. En la situación inversa (si el precio ha bajado desde el inicio del espacio de tiempo estudiado) la vela será negra, con el precio de apertura en la parte superior, y el precio de cierre en la parte inferior. La longitud de la mecha o de la sombra, tanto de arriba como de abajo, dependerá del precio más alto y más bajo del espacio de tiempo estudiado.
La vela doji aparece cuando el precio de apertura y cierre son prácticamente iguales. Sin embargo, dichas velas pueden diferir entre sí. La longitud de la mecha o de la sombra puede ir adquiriendo diversos tamaños dependiendo de cada situación. Doji lo que realmente nos muestra es que en el mercado tiene lugar una lucha entre los compradores y los vendedores, en la que ninguno de los dos bandos es capaz de vencer al otro. Como consecuencia incrementa la inseguridad y la falta de decisión. Se trata de momentos en los que es mejor esperar y hacer un descanso para el café.
Como ya hemos mencionado más arriba, algo parecido ocurre con los doji de patas largas, que muestran que la lucha entre la oferta y la demansa es aún más intensa.
Los precios de apertura y cierre son la parte más importante de la vela. La apretura es alta, se encamina hacia abajo y antes del cierre vuelve a recuperar el alza. Doji libélula parece la letra T, con una sombra inferior baja y ausencia de la sombra superior. Desde el principio se observa una ventaja por parte de los vendedores, sin embargo, en tal de que aparezcan algunos compradores, los precios vuelven a sus niveles del principio. Es un tipo de vela que puede ser de gran ayuda si aparece en un momento de demanda.
Se trata de una estructura inversa a la libélula.
Se trata de una vela de oferta o demanda de pequeñas dimensiones con una pequeña sombra superior y una larga sombra inferior. La sombra inferior debería tener una longitud dos o tres veces mayor al cuerpo de la vela. Se trata de una formación de reversión que anuncia una situación en la que el comprador posee una mayor frecuencia de transacción. Sin embargo, no significa que se haya perdido el control sobre ello. Aparece una momentánea bajada que informa de un futuro cambio de los precios. Se trata de un aviso.
Consiste en un cuerpo pequeño muy próximo a la sombre superior, carente de la sombra inferior o con una sombra inferior muy corta. Se trata de una formación que se considera un toro de la tendencia bajista. Nos indica el momento en el cual los vendedores tenían el control y el momento en el que los compradores consiguieron hacerse con el mismo, a consecuencia de los cual, el precio vuelve arriba al nivel de apertura o incluso superior. Debemos recordar que el martillo no nos informa del control total por parte de los compradores, sino que sólo nos indica su refortalecimiento y un mayor número de transacciones de compra.
Se trata de una formación de reversión. Después de un movimiento hacia abajo, una larga sombra inferior nos indica la presencia de los compadores que nos ha conseguido mantener el movimiento. Se necesita de una prueba de la fuerza y resistencia de los compradores. Es mucho mejor cuando el martillo inverso viene precedido de un hueco o una vela de demanda larga de un tamaño considerable.
Una sombra inferior o superior larga: Se trata de una vela de alza o baja con una vela superior o inferior, 2 o 3 veces mayor al cuerpo de la vela. La vela bajista se asocia a la oferta, mientras que la vela alcista se asocia a la demanda.
La característica principal de este tipo de vela, tanto de oferta como de demanda, es el hecho de que no tenga ningún tipo de sombra, superior ni inferior. Se considera una señal de continuación de tendencia.
Una estrella fugaz: Una vela de oferta o demanda con ausencia de sombra inferior y una arga sombra superior.