Mañana se publican algunos datos claves que se proyecta serán cruciales para saber cómo evolucionarán las divisas este año: los datos inflacionarios de EEUU.
Diciembre marcó un retroceso en la recuperación ya que los casos de covid anotaron su cifra más alta para ese entonces. Entonces no es sorpresa si algunas de las dinámicas económicas hayan vuelto a los niveles de la pandemia.
Pero el asunto más presente es para dónde el mercado prevé que irá la inflación. El índice del dólar ha estado al alza en estos días, principalmente debido a debilidad en el apetito por el riesgo y expectativas de tasas más altas.
El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense subió, incrementando la demanda por el dólar y pesando sobre el alza de la bolsa. Y eso se relaciona con la expectativa de inflación; por ello si bien la Fed se está concentrando más en el empleo por ahor, aún sigue importante las cifras del IPC.
Qué estamos buscando
Hay una avalancha de datos IPC que se publicarán al mismo tiempo, pero las dos a la que hay que prestar atención son es el IPC excluyendo alimentos y energía en su versión mensual y versión anual. Estos son los que sigue la Fed, entonces son los más relevantes para el mercado.
El consenso está basado en la visión del mes pasado de que la inflación iba a estar baja durante el resto del año. Se entendía que la pandemia iba a mantener a la baja el precio de los arriendos y la energía.
También se proyectaba que las tasas de interés iban a ser bajas hasta bien adentrado al 2023 que reducirían el costo de financiamiento para las empresas. Eso cambió un poco el 6 de enero.
Los datos
Noviembre tuvo un componente inflacionario inusualmente alto, y se espera que el IPC vuelva a sus “niveles normales”. Se proyecta que el IPC excluyendo alimentos y energía para diciembre haya crecido solo 0.1% comparado con 0.2% en noviembre.
Estaría dentro del rango normal de los últimos meses cuando ha habido inflación baja permitiendo tasas bajas desde la última recesión.
IPC excluyendo alimentos y energía anual está pronosticado a mantenerse estable en 1.6%, los mismo que el mes anterior. Bien por debajo de la antigua meta del 2.0% de la Fed.
Para dónde vamos
Una vez que las vacunas lleguen en masa, se espera un cambio en las dinámicas inflacionarias. Las restricciones de viajes y prohibiciones de subir los arriendos han mantenido el costo de energía y vivienda más bajo. Por otro lado, las bajas tasas han empujado al alza el precio de vehículos y casas por encima de ratios tradicionales. El precio del crudo también
mantiene a la baja el la inflación. Pero luego del 20 de enero podría haber otra situación geopolítica en el medio oriente, y podría cambiar la trayectoria esperada del precio del crudo.
Justo ayer aparecieron informes de que la administración Biden no está cómoda con una meta de 100 millones de vacunaciones en los primeros 100 días.
EEUU necesita lograr del orden de los 170 millones de inyecciones para que los epidemiólogos estén dispuestos a recomendar un término de los confinamientos.
Pero si hasta el mismo gobierno no está dispuesto a pronosticar que para fines de abril tendrá 100 millones de vacunas, podría ser que será mucho más allá de mayo cuando la dinámica económica de la pandemia cambie.