Próximamente tendremos algunas cifras que muestran cómo ha sido desequilibrada la recuperación post-pandemia en diversos países. Y esta brecha es una oportunidad interesante para ajustar la cartera.
Luego por la tarde tenemos las cifras inflacionarias de EEUU, y mañana Gran Bretaña hará lo mismo.
Se espera que una tasa inflacionaria más alta en EEUU sea tema tan urgente para la Fed. Pero la tasa significativamente más baja en Inglaterra podría influir en las decisiones del BOE.
Así vemos la divergencia en la política monetaria.
Qué se viene
EEUU está pronosticado a informar una inflacion de un 0,5% para junio, una leve ralentización desde el 0,6% anterior.
Comprado con el año anterior, implicaría una tasa de 4,9%, también un poco menor que el 5,0% de mayo. Es lo que probablemente acapará los titulares.
Pero al eliminar los elementos más volátiles de alimentos y energía, el IPC subyacente está pronosticado a mostrar un cambio mensual de 0,5%, un poco más lento que el 0,7% de mayor. Así la expectativa para la inflación anual subyacente de 4.0% comparado con 3.8% informado la vez pasada.
Eso es el doble de lo que normalmente toleraría la Fed, e incluso más alto que varios de sus reguladores han dicho estar dispuesto a permitir durante la recuperación.
Por qué la poca reacción
A pesar del aumento en la inflación hasta dejar en negativo la variación real de los sueldos, la Fed insiste en que será transitorio.
De hecho, que la tasa baje aunque sea un poquito podría ser una señal de que tienen la razón, pues señalan que esperan que la inflación vuelva a estar bajo control para fin de año.
Eso sí, hay algunos que no están de acuerdo, como el Presidente de Dallas, Kaplan, quien está preocupado por el aumento en la inflación. Pero no es un miembro del comité de la divisa, y no lo volverá a ser hasta el 2023.
____Miriam Sánchez____
Las diferencias al otro lado del Atlántico
Mañana se publica el cambio en el IPC de Gran Bretaña, que está pronosticado en 2,2% anual, un leve aumento desde los 2,1% anterior. Sin embargo es la cifra subyacente la que influye en la política monetaria, y ésta está pronosticada a mantenerse en 2,0%, exactamente en la meta del BOE.
Como para confirmar la idea de que la inflación está bajo control, se pronostica un IPC mensual de 0,2%, una reducción desde 0,6% en el mes anterior.
Afectando al mercado
Desde luego, Gran Bretaña está en una situación diferente, pues seguirán en pie las restricciones contra covid hasta este fin de semana.
Siguen estando preocupados por la variante delta, que pesa sobre el rebote en la economía.
Una gran diferencia es que el BOE no se ha comprometido a dejar subir la inflación por encima de su meta, como lo ha hecho la Fed. Entonces, mientras se mantiene donde está la inflación, podríamos esperar que el BOE no cambie su política.
Pero si superar las expectativas, podrían cobrar fuerza la idea de que el banco deberá ajustar su política, lo que daría vientos en popa para la libra.