El Banco Central Europeo dijo el jueves que incorporará en mayor medida las consideraciones relativas al cambio climático en su política monetaria, especialmente en lo que respecta a la comunicación pública, la evaluación de riesgos y las decisiones sobre los avales y las compras de activos del sector empresarial.
"De cara al futuro, el BCE ajustará el marco que guía la asignación de las compras de bonos corporativos para incorporar los criterios del cambio climático, en línea con su mandato", dijo, al anunciar los resultados de una revisión estratégica largamente esperada.
"Estos incluirán la alineación de los emisores con, al menos, la legislación de la UE que implementa el acuerdo de París a través de métricas relacionadas con el cambio climático o compromisos de los emisores con tales objetivos", añadió el comunicado.
El BCE ya compra bonos verdes
Esta medida se suma a una serie de pasos dados por los principales bancos centrales del mundo para tener en cuenta en su estrategia el cambio climático, aunque algunos, como la Reserva Federal de Estados Unidos, insisten en que la lucha contra el mismo es competencia de los Gobiernos. El BCE ya compra bonos verdes y posee alrededor de una quinta parte de los activos verdes que cumplen sus criterios de idoneidad, lo que ya ha provocado un aumento de las emisiones.
