Los mercados asiáticos empiezan con debilidad, ya que los temores de recesión que recorren los Estados Unidos el viernes, siguen pesando en el sentimiento de Asia. Por una vez, los mercados asiáticos no se mueven al mismo ritmo que los estadounidenses, y lo achaco a las distorsiones de los vencimientos de las opciones en Wall Street el viernes. El S&P 500 cerró con una subida de sólo el 0,22% el viernes, pero el Nasdaq subió un 1,43%, mientras que el Dow Jones bajó un 0,16% tras los débiles datos de fabricación y producción industrial de EEUU. En Asia, los futuros estadounidenses están subiendo, aunque al ser hoy día festivo en EE.UU., no estoy poniendo demasiado énfasis en la acción de los precios. Los futuros del S&P suben un 0,17%, los del Nasdaq un 0,50% y los del Dow no cambian.
Los mercados de la China continental han retrocedido con fuerza después de que China dejara sin cambios sus RPL a 1 y 5 años, un movimiento contraintuitivo. La noticia de que Shenzhen ha encerrado aparentemente a algunos barrios en los frenos al virus también debería ser un viento en contra. No obstante, el Shanghai Composite no ha cambiado, pero el CSI 300 ha subido un 0,65%, y el Hang Seng de Hong Kong ha subido un 0,15%. La acción de los precios parece ser "comprar en el peor de los casos" y "suavizar".