La Comisión Europea revisó el miércoles al alza sus estimaciones de crecimiento de la zona euro para este año y el próximo, pero advirtió de los riesgos que suponen las nuevas variantes del coronavirus, que deben contenerse para evitar nuevas restricciones.
El brazo ejecutivo de la Unión Europea también espera una mayor inflación este año de lo que había previsto anteriormente para el bloque monetario de 19 países, pero estimó que el crecimiento de los precios al consumo se ralentizará el próximo año.
La Comisión Europea predijo que la zona euro crecerá un 4,8% este año, mucho más rápido que el 4,3% que había previsto en mayo. Esta revisión se debe en gran medida a la reapertura de las economías nacionales del bloque en el segundo trimestre, que benefició al sector de los servicios y es de esperar que impulse el turismo en la UE, dijo la Comisión.
Se prevé que la recuperación de la crisis económica provocada por la pandemia continúe el próximo año, cuando se prevé que la zona euro crezca un 4,5%, más que la expansión del 4,4% estimada en mayo. La Comisión advirtió, sin embargo, que los riesgos sobre las perspectivas seguían siendo elevados, aunque se consideraban equilibrados.
Instó a seguir intensificando la campaña de vacunación para contener las amenazas que suponen la propagación y la aparición de variantes del coronavirus, y en particular de la variante delta, más transmisible. Se espera que Delta se convierta en la variante do