Una vez recuperada casi por completo la normalidad en los centros comerciales, tras el paso del virus, ahora la preocupación se centra en el deterioro del consumo. La fuerte inflación en bienes de consumo básico, como energía y alimentación, unido a unos mayores costes de financiación, está erosionando el poder adquisitivo y el sentimiento del consumidor.
El FMI considera que las subidas de tipos de interés de los bancos centrales para contener la inflación pueden provocar que el precio de la vivienda caiga en los próximos tres años hasta un 10 % en las economías avanzadas y un 25 % en los mercados emergentes:
El FMI considera que las subidas de tipos de interés de los bancos centrales para contener la inflación pueden provocar que el precio de la vivienda caiga en los próximos tres años hasta un 10 % en las economías avanzadas y un 25 % en los mercados emergentes. pic.twitter.com/9SDClwIIUM
— EFE Noticias (@EFEnoticias) October 11, 2022
La Confianza del Consumidor se encuentra en mínimos históricos, incluso por debajo de los niveles alcanzados en los meses de confinamiento más estricto por el COVID (2020)
Por otra parte, el comercio electrónico continúa en ascenso, ganando cuota de mercado sobre el canal físico. En este entorno, el principal reto de los centros comerciales es mantener los niveles de ocupación elevados y tasas de esfuerzo de los comercios en niveles razonables. Para ello, renunciarán probablemente a la revisión contractual de las rentas en base a inflación y no descartamos incluso posibles rebajas en algunos casos.
Los más vulnerables son los centros comerciales no dominantes en grandes ciudades como Madrid y Barcelona, donde la oferta es más elevada
Según nuestros cálculos, las valoraciones de activos de centros comerciales ya han caído cerca de -11% a nivel global desde 2020 (- 5% en España). Prevemos nuevas rebajas en 2023 y 2024, motivadas en esta ocasión por el fuerte repunte en rentabilidad de los bonos soberanos. Recomendamos evitar exposición a centros comerciales y tiendas a pie de calle, mientras que parques de medianas comerciales y supermercados deberían sufrir menos en este entorno.