El banco central de Australia dejó el martes su tasa de interés en el mínimo histórico del 0,1% y dijo que probablemente la mantendrá así hasta 2024, aunque redujo su programa de compra de bonos.
Como esperaba la gran mayoría del mercado, y anunció una tercera ronda de su programa de estímulos masivos (la denominada flexibilización cuantitativa o QE por sus siglas en inglés), aunque de menor tamaño que las dos anteriores.
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El RBA continuará comprando bonos del Estado más allá del actual periodo previsto, que vence en septiembre, a un ritmo semanal de 4.000 millones de dólares australianos, en lugar de los 5.000 millones actuales.
Los analistas consultados para una encuesta de Reuters habían pronosticado por unanimidad que el RBA limitaría su objetivo de rendimiento hasta abril de 2024, en lugar de extenderlo hasta noviembre. En cuanto a la QE, la mayoría esperaba un escenario "flexible". [AU/INT]
En un breve comunicado posterior a la reunión, el gobernador del RBA, Philip Lowe dijo que las medidas del martes "proporcionarán el apoyo monetario continuo que la economía necesita en su transición de la fase de recuperación a la fase de expansión".
El RBA recortó los tipos de interes tres veces el año pasado hasta alcanzar los actuales mínimos históricos y lanzó un programa de compra masiva de bonos para reducir los costes de los préstamos y estimular el gasto.
Los estímulos monetarios, junto con el apoyo fiscal del Estado australiano, han impulsado la economía del país, de 2 billones de dólares australianos, actualmente en un nivel mayor que el anterior a la pandemia. El mercado de trabajo de Australia se está ajustando rápidamente, el mercado inmobiliario se está calentando y el gasto de los consumidores está en auge..